Periodismo desde el centro del mundo

Talita Bedinelli recebe segundo lugar da 39ª edição do Prêmio Direitos Humanos de Jornalismo. Foto: Daniel Marenco.

El reportaje de estreno de SUMAÚMA —«¿Por qué los garimpeiros comen las vaginas de las mujeres Yanomami?»— fue reconocido con el segundo puesto del Premio Derechos Humanos de Periodismo, en una ceremonia que tuvo lugar el viernes 9 de diciembre. En el premio, promovido por el Movimiento de Justicia y Derechos Humanos y por el Colegio de Abogados de Brasil de Río Grande del Sur, se inscribieron 340 trabajos. Talita Bedinelli realizó el reportaje en colaboración con la indigenista, antropóloga y traductora del yanomam Ana Maria Machado y con el fotógrafo Pablo Albarenga, editor de imagen de SUMAÚMA. El reportaje, que se publicó el 13 de septiembre, tuvo el apoyo del Instituto Socioambiental, una de las más respetadas organizaciones de Brasil.

El reportaje premiado se llevó a cabo con todo el cuidado ético y el rigor periodístico que integran la carta de principios de nuestra plataforma trilingüe de periodismo. Elegimos contar la catástrofe humanitaria que vive el pueblo Yanomami desde que su territorio fue invadido por unos 20.000 garimpeiros partiendo del punto de vista de las mujeres, que en general están aún más invisibilizadas. Para entender las palabras exactas de una población que, mayoritariamente, no habla portugués y entender sus declaraciones en su contexto cultural, contratamos a dos traductoras: una Yanomami, Ehuana Yaira, y la otra, una antropóloga con más de una década de experiencia con grupos Yanomami, Ana Maria Machado.

La frase del título la repitieron las mujeres entrevistadas al relatar las violaciones colectivas a adolescentes que cometen los garimpeiros. Algunas de estas niñas habían sido reclutadas por jóvenes Yanomami, previamente corrompidos por la minería ilegal. Con parte del territorio dominado por el crimen organizado, el pueblo indígena está amenazado por la violencia y las enfermedades, algunas traídas por los invasores y otras provocadas por la contaminación de ríos y arroyos. Como enfatizamos en nuestro primer editorial, SUMAÚMA «nace en tiempos de guerra, una guerra contra la naturaleza y sus pueblos que está llevando el planeta a una catástrofe climática y a la sexta extinción masiva de especies. En las guerras, las mujeres, adultas y niñas, son las más silenciadas y las que más sufren».

Para que las mujeres pudieran ser entrevistadas sin correr el riesgo de morir, las sacamos en avión de su aldea y las llevamos a un lugar seguro. Como no podían ser identificadas, SUMAÚMA les pidió que dibujaran lo que vivían. Varias dibujaron grandes penes como figuras amenazadoras. El fotógrafo Pablo Albarenga hizo un montaje uniendo los retratos de las autoras con sus dibujos, para respetar la expresión de su miedo cotidiano sin ponerlas en riesgo. El resultado fue impresionante.

El Movimiento de Justicia y Derechos Humanos, creado en los años 70, desempeñó un papel determinante tanto en la dictadura empresarial y militar (1964-1985) como en el proceso de redemocratización del país. Es una de las instituciones más respetadas no solo en Brasil, sino en los países del Cono Sur, donde las dictaduras militares se coordinaron en lo que se conoció como Operación Cóndor para reprimir, perseguir, secuestrar y ejecutar a los opositores ilegalmente. Cuando Brasil se redemocratizó, el Movimiento de Justicia y Derechos Humanos siguió presionando para que se buscara a los desaparecidos políticos y se juzgaran los crímenes que cometieron agentes del Estado. Su actuación en la denuncia de las violaciones que se cometen contra las minorías también es importante. En 2017, su fundador, Jair Krischke, una de las figuras más respetables de la lucha histórica por los derechos humanos, fue incluido en una lista de 13 personas amenazadas de muerte. Para SUMAÚMA es un honor que una institución con una historia de tanta dignidad haya reconocido su trabajo.

En la categoría Reportaje, los ganadores fueron Vinícius Valfré, Leonencio Nossa y Wilton Junior, con «Los cárteles de droga sustentan un Estado paralelo en la Amazonia», publicado en el periódico O Estado de S. Paulo, y Luiz Claudio Cunha con «Muere un torturador: encubierto por los medios, eximido por la justicia, condenado por la historia», publicado por el Observatório da Imprensa. También se concedió el segundo puesto al periodista Weslley Galzo, con «La justicia restaurativa propone acciones para facilitar la reinserción de los condenados», un reportaje publicado en O Estado de S. Paulo. Raphael Guerra Chaves, del Jornal do Commercio de Recife, obtuvo el tercer puesto por «Las armas de fuego matan, pero el Estado desconoce su origen». El periódico Extra Classe, de Porto Alegre, recibió una mención honorífica por «La política de exclusión y muerte en los seguros de salud».

A continuación, del más reciente al más antiguo, enumeramos los trabajos que hemos hecho sobre los crímenes cometidos contra el pueblo Yanomami para señalar que es urgente que se expulse inmediatamente a los invasores en cuanto el presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva tome posesión del cargo, a principios de enero.

 

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